viernes, 13 de septiembre de 2013

Los concejales socialistas no acuden a adular a Silvia Clemente

Recordaron al alcalde que él sería un candidato idóneo para ser hijo adoptivo del municipio el día que deje la alcaldía

El Grupo de Concejales del PSOE de Valencia de Don Juan no asistió durante la mañana al acto institucional de nombramiento de hija adoptiva de Silvia Clemente, al igual que no lo hicieron al de Óscar López en Pajares de los Oteros, porque rechazan tajantemente el uso de las instituciones públicas para las estrategias personales más propias de trepadores orgánicos que de responsables públicos.

En la zona solo hay dos hijas adoptivas que sí cumplen los requisitos que un honor de estas características debe reunir: la unanimidad de la corporación y la vinculación real y afectiva con el municipio, como lo fueron la tenista Virginia Ruano en Matanza de los Oteros y la gimnasta internacional Andrea Pozo, en Villademor de la Vega.
Con idéntica argumentación, Isabel Carrasco podría ser nombrada hija adoptiva de la localidad
Durante el pleno en el que los votos del PP y el representante del MASS sacaron adelante el nombramiento, los socialistas recordaron que si Silvia Clemente tuvo el privilegio de inaugurar una Feria de Febrero es ella quien está en deuda con el pueblo coyantino y no al revés.

Los argumentos esgrimidos por Martínez Majo a la hora de realizar el nombramiento servirían para nombrar hijos adoptivos de la localidad también a Isabel Carrasco o a José Luis Rodríguez Zapatero, que desde sus gobiernos han realizado importantes inversiones en la localidad y en la zona, así como a cualquier otro amigo con el que se quiera quedar bien o se decida hacerle la pelota para en un futuro poder recordarle ¿qué hay de lo mío?
En la zona solo hay dos hijos adoptivos merecedores de tal: la tenista Virginia Ruano en Matanza de los Oteros y la gimnasta internacional Andrea Pozo, en Villademor de la Vega
Para finalizar, los socialistas han recordado en varias ocasiones al alcalde de la localidad, natural de Velilla de la Reina, que, en el momento en que él deje el cargo, sería una persona idónea para ser nombrado hijo adoptivo del municipio. Pero ya no sería el primero.

jueves, 12 de septiembre de 2013

Mañana, Silvia Clemente hija adoptiva

Fotografía obtenida de la fototeca del Diario de León
Lamentamos que Majo piense más en sí mismo y en su futuro que en los ciudadanos

El PSOE en la localidad lamenta la falta de sentido común del regidor coyantino al haber decidido llegar hasta el final con el nombramiento de Silvia Clemente como hija adoptiva de la localidad, hecho que se produjo en el pleno de finales de agosto sin la unanimidad requerida para estas distinciones.
La adopción de Silvia Clemente es el acto más desvergonzado de oportunismo político realizado en nuestra provincia 

Es triste que la distinción se produzca en medio de las fiestas patronales, hecho que las politiza por primera vez, lo que supone una irresponsabilidad política añadida e injustificable en alguien que lleva más de 18 años en la alcaldía. La adopción de Silvia Clemente se convierte así en el acto más desvergonzado de oportunismo político realizado en nuestra provincia en los últimos tiempos, que recuerda mucho al fallido nombramiento de Francisco Álvarez Cascos como Paisano de Honor el Día de Asturias, bollu preñado incluido: utilizar las instituciones públicas para hacer carrera política.

Los ciudadanos no entienden que un político sin relación alguna ni con la localidad ni con nuestra comarca, como lo es Silvia Clemente, sea la primera persona en obtener esta distinción en Valencia de Don Juan. Majo se convierte así en el más oportunista de los procuradores que con su voto validan la gestión de la Consejera de Agricultura en las Cortes.
Los ciudadanos no entienden que un político sin relación alguna con la localidad sea el primero en obtener esta distinción
Se rebela falsa aquella promesa electoral de que iría a las Cortes a reivindicar y alzar la voz de los intereses del sur de León en Valladolid, cuando lo que está haciendo es procurar sus intereses personales y labrar su futuro político a costa de validar todos los recortes sociales, todas las ayudas a los ayuntamientos y todas las afrentas a la provincia de León que se plasman en cada uno de los presupuestos que apoya con su voto en las Cortes de Castilla y León.

Tribuna en el Diario de León, sobre regadíos en la provincia

Hablando seriamente sobre los regadíos de León

El pasado 7 de septiembre publicaba un artículo Guillermo García, Delegado Territorial de la Junta de Castilla y León, vertiendo groseras falsedades y realizando una apropiación indebida sobre la modernización de los regadíos leoneses y la transformación de Payuelos. El artículo, escrito para adular a la reciente e injustificada hija adoptiva de Valencia de Don Juan, es una muestra antológica de lo que en este periódico se ha bautizado como el “estado de la desfachatez”.

León es la provincia de toda España que más hectáreas agrícolas ha modernizado con riego presurizado (37.550 ejecutadas y programadas) y que más inversión ha recibido y tiene programada (aproximadamente 230 millones de euros), con un ahorro de agua de 110 hectómetros cúbicos y un incremento de la productividad agraria superior al 40%. Esto solo fue posible desde el año 2004, cuando el Gobierno de Zapatero decidió que la modernización del regadío fuera una prioridad para asegurar el futuro de nuestra agricultura. Hasta entonces el PP llevaba 17 años gobernando la comunidad sin que se hubiera presurizado el riego de una sola hectárea en León ni estuviera previsto porque las grandes comunidades de regantes no tenían interés o ya habían votado contra la modernización. El equipo de SEIASA, encabezado por el leonés Graciliano Palomo, llevó a cabo una intensa campaña de persuasión entre los regantes de nuestra provincia (a veces pueblo a pueblo), consiguió los fondos para invertir, redactó los proyectos, firmó convenios y finalmente ejecutó el 80% de las obras, mientras que la Junta realizaba el 20% restante. Puede comprobarlo el Delegado preguntando a los agricultores y, si le resulta demasiado trabajoso, desde su sillón solo tiene que escribir “modernización de regadíos” en la hemeroteca del Diario de León.

Sin embargo, algo va muy retrasado en la modernización de los regadíos leoneses: la reconcentración parcelaria que debía ejecutar la Junta de Castilla y León simultáneamente. Hay miles de hectáreas modernizadas desde hace años que los propietarios no pueden amueblar porque siguen esperando la parcela definitiva. Esa es una competencia exclusiva de la Junta, el retraso es de su exclusiva responsabilidad y el Sr. Delegado de la Junta debe explicarse ante los agricultores que quieren hechos y no propaganda.

En cuanto a Payuelos decir que solo con el Gobierno de Zapatero, y gracias también al empeño de Graciliano Palomo, se desbloqueó la situación. Dos ejemplos: Real Decreto 1520/2007, de 16 de noviembre, por el que se aprobaba el “Plan General de Transformación de las áreas Centro y Cea, sectores VI al XXIV de la subzona de Payuelos” para 32.000 hectáreas. A continuación ya pudo retomarse el proyecto del Canal Bajo de Payuelos que fue adjudicado por Aguas del Duero en 33,3 millones de euros, publicado en el BOE del 21 de febrero de 2008, e iniciadas las obras con suma rapidez. ¿Recuerda, Sr. Delegado, qué gobierno había en esas dos fechas?

Hasta entonces los gobiernos de José María Aznar y de la Junta habían mantenido el proyecto paralizado durante años para desesperación de los agricultores. Según José Valín, entonces Consejero de Agricultura y ahora Presidente de la CHD, el problema eran los recursos contra el trazado del canal que interponía Antonio Fernández, arrendatario de La Mata del Moral, el mayor latifundio de León, propiedad de la Fundación Álvarez Carballo. Ciertamente, Antonio Fernández interponía recursos para seguir cazando, pero lo decisivo era su relación con Fraga (en la época impune de Naseiro y Javier de la Rosa) por la que alcanzó gran notoriedad en la prensa nacional a finales de 1999. De aquellas cacerías cerca de Mansilla vienen estas “bárcenas”.

El Gobierno de Aznar y la Junta de Castilla y León, satisfechos con la paralización de la mayor parte de Payuelos, llevaban a cabo el trasvase del agua de Riaño al Carrión, eso sí, con parada y fonda en Villalón de Campos, el pueblo de Valín, en el que han construido dos gigantescas balsas para regar miles de hectáreas sin ningún soporte legal. Todo este fraude a los leoneses se hizo además con la complicidad activa, pasiva y bilateral del entonces Presidente de la Comunidad de Regantes de Payuelos, Francisco Lupicinio Rodríguez, actual Vicepresidente de la Diputación Provincial, que finalmente tuvo que salir por la gatera cuando los agricultores se hartaron de tener en casa al enemigo que impedía regar las zonas del Esla con toda la infraestructura finalizada.

En resumen: a pesar de los aznares, los fernández, los valines y los lupis, el Canal Bajo de Payuelos se está acabando porque los socialistas lo iniciaron y lo sacaron del callejón sin salida en que el PP lo había metido mientras se llevaba el agua para Valladolid.     

Jorge Mateos Álvarez, portavoz del PSOE en Valencia de Don Juan, publicada en el Diario de León el 12 de septiembre de 2013

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Revista de prensa. Bollu con queso para Silvia Clemente

Bollu con queso

A este ritmo que imponemos en León, Felipe González pregonará las fiestas de Riaño antes de que el gallo cante tres veces; y hasta es posible que la ponencia de apertura del congreso de la UPL corra a cargo de Rodolfo Martín Villa. Sólo ahora hemos podido llegar a comprender que en ese puñado de hectáreas que aglutina Valencia se viva como en la Suiza teutona mientras en el resto de la provincia amanece a Eritrea cada día. Los bienhechores de León suelen ser tan desprendidos que antes de poder cumplir con tanta generosidad nos va a sobrevenir la muerte.

Qué no será cuando a Majo le asalte el deber de adoptar al que forró con 20 millones de euros la pista para que despeguen aviones de Valladolid

Se va a inaugurar un tiempo de servilismo torrencial que no deja ver cuándo comienza la pleitesía y termina la elegancia en el trato entre administrados y gestores. Lo mismo se convoca un circo de reverencias que se cita a una adopción; si el premio de esta semana es emérito por el queso castellano, la pasta de Siro, el auxilio de Panrico, el socorro a Lauki, los hispano bretones de Burgos, la equitación de Segovia, el laboratorio lácteo de Palencia, el Itacyl de Valladolid, los solubles del Cerrato o la plana enmendada a Cañete por el gocho ibérico, qué no será cuando a Majo le asalte el deber de adoptar al que forró con 20 millones de euros la pista para que despeguen aviones de Valladolid o al que le firma el cheque anual de tres mil millones de pesetas del vellón al décimo consejero del ente, para que gestione el call center de las emergencias y pague nóminas junto a la Junta; ese día habrá que reabrir las minas de Las Médulas para fundir la peana de Ciguera. 
Se va a inaugurar un tiempo de servilismo torrencial que no deja ver cuándo comienza la pleitesía y termina la elegancia en el trato entre administrados y gestores
El bollu que viene supera de largo a aquellos que llenaron de vísceras asturconas las calles coyantinas, cuando Cascos y Rozada se batían en duelo en las guerras intestinas de la derecha astur. Por si la organización no ha previsto aforo saturado, que tenga en cuenta el deber de la asistencia; acudirán en masa los corifeos que se han beneficiado de las lisonjas que salpicaron fuera del círculo agraciado de Coyanza; los de Euleón, a la ofrenda de las adjudicaciones; los de esa estafa a la sociedad que son las ayudas de la PAC a los que no se asoman al surco; irán al besamano los socialistas que le deben al anfitrión favores impagables; y ese ejército de descolocados, adoptables en potencia, que tiritan desterrados del PP; este bollu se da con queso, con queso castellano. Al final se va a cumplir el peor de los presagios apocalípticos: acabarán con los leoneses antes que con la brucelosis.


Luis Urdiales, Diario de León, 11 de septiembre de 2013

lunes, 2 de septiembre de 2013

Silvia Clemente, primera hija adoptiva del municipio sin unanimidad

El pleno nombra a Silvia Clemente hija adoptiva con el voto en contra del PSOE*

El Ayuntamiento de Valencia de Don Juan nombró ayer en un pleno extraordinario a Silvia Clemente, consejera de Agricultura y Ganadría, hija adoptiva de la localidad con los votos favorables del PP y Mass y en contra del PSOE.

El portavoz socialista, Jorge Mateos, pidió que se retirara la propuesta «ya que más que un nombramiento institucional, se trata de un homenaje de partido, que ustedes deberían hacer en el PP», dijo dirigiéndose al equipo de Gobierno. Y añadió que «los políticos están al servicio del pueblo y no al revés. No es de recibo que ella sea la primera hija adoptiva de Valencia de Don Juan. Incluso nos parecería más razonable que usted, cuando deje el cargo, fuera nombrado hijo adoptivo», afirmó en referencia al alcalde.
Los políticos están al servicio del pueblo y no al revés.
El portavoz del Mass, Ignacio Alonso, justificó su voto a favor como muestra de agradecimiento y para que en adelante «su compromiso sea mayor con Valencia de Don Juan».

El alcalde, Juan Martínez Majo, defendió el nombramiento aludiendo a inversiones defendidas por Clemente para Valencia de Don Juan como el paseo del río, la depuradora, la potabilizadora o la sede de la DO Tierra de León, por nombrar algunas.
El propio alcalde, Martínez Majo, cuando deje el cargo, sería, a nuestro juicio, un candidato más razonable para ser nombrado hijo adoptivo de nuestro municipio.
El pleno aprobó también, por unanimidad, la Cuenta General del 2012 y la prórroga de la concesión administrativa de la emisora municipal.

*Información recogida del Diario de León del sábado, 31 de agosto de 2013

Martínez Majo, el balconing y las siete diferencias

Cuando uno ostenta un cargo público entendemos que debe de ser responsable en todas sus manifestaciones públicas. Este verano los ciudadanos de Valencia de Don Juan nos sorprendimos con este relato juvenil del regidor coyantino, donde apenas hay diferencias, salvando la distancia del tiempo transcurrido, con el que podría realizar hoy cualquiera de los jóvenes turistas que acuden a la costa del mediterráneo, con el "desmadre" como consecuencia.